Nuestro primer vino con D.O.P. Vino de Calidad Granada “Contraviesa-Alpujarra”. Un monovarietal Tempranillo, con nulo contenido en sulfitos, elaborado con la mejor calidad de uva y tras 13 largos meses de crianza.
Su nombre es un homenaje a la más imponente y recia edificación de los palacios nazaríes y de toda la Alhambra.
Añada
2010
D.O.
Granada “Contraviesa-Alpujarra”
Variedades
100 % Tempranillo.
Suelos
Francos, ligeramente ácidos.
Elaboración
Vendimia manual, entre el 1 y el 10 de septiembre. 13 meses de crianza en barricas de roble. En botella desde el 26 de junio de 2012.
Producción
3.012 botellas de 75 cl.
Cata
Vista: color rojo picota con ribetes teja. Nariz: aromas balsámicos, torrefactos y especiados. Boca: cálido, aterciopelado, amplio y estructurado. Postgusto muy largo.
Temperatura óptima de consumo
Entre 14 y 18 ºC.
El coupage de la variedad Vijiriego –autóctona de la Alpujarra granadina– y Pedro Ximénez, junto a un especial proceso de vinificación mediante fermentación malolática, aportan a este vino inconfundible una personalidad única.
Su nombre rinde homenaje a la más antigua estancia de los palacios nazaríes, en la Alhambra, y una de las más exquisitas de todo el conjunto.
Añada
2011
I.G.P.
Cumbres del Guadalfeo.
Variedades
70 % Vijiriego y 30 % Pedro Ximénez.
Suelos
Francos, ligeramente ácidos.
Elaboración
Vendimia manual, entre el 10 y el 20 de septiembre. Fermentación maloláctica, a menos de 15 ºC, realizada durante el invierno de 2012.
Producción
1.830 botellas de 75 cl.
Cata
Vista: color amarillo pajizo con destellos dorados. Nariz: aromas primarios típicos de otoño, y secundarios tipo flor de almendro. Boca: ataque muy suave y fresco, con postgusto semi-amargo y almizclado, de buena persistencia.
Temperatura óptima de consumo
Entre 6 y 10 ºC.
La familia Lorente seguimos trabajando, día a día, con el mismo espíritu de nuestro fundador, que sigue al frente de Bodegas Nazaríes.
Cultivando nuestros viñedos de forma personalizada. Dando a cada variedad los cuidados específicos que requiere. Y adecuando los sistemas de vinificación a cada tipo de uva y a las características de cada cosecha.
Todo, para obtener cada año la máxima expresión organoléptica de nuestros vinos. Para recuperar aquellos productos únicos, de gran calidad y personalidad propia, que fueron seña de identidad de la comarca y orgullo de sus gentes. Y que ahora vuelven a serlo.
A finales de los 70, en las tierras del Cerro del Gato, que habían gozado de una tradición vinícola de más de cien años, apenas sobreviven 2 hectáreas de viñedos en producción. Algo que pronto va a cambiar...
1978
Miguel Lorente planta las primeras vides de variedades procedentes de los pocos viñedos, todos centenarios, que aún quedan en la región.
1979
En el mismo Cerro del Gato, a 750 m de altitud, funda las Bodegas Nazaríes. Las primeras cosechas se elaboran con útiles tradicionales, como prensas verticales de “tornillo de Arquímedes” y cubas de madera.
1989
Se incorpora una despalilladora de acero inoxidable, una prensa horizontal de platos y dos depósitos del mismo material.
2000
Se construye una nave de fermentación y las bodegas se dotan de la última tecnología. También se plantan nuevas vides de variedades no autóctonas.
Hoy
Contamos con los equipos más avanzados y dos grandes salas: una de transformación y almacenaje de vinos, y otra destinada a crianza y envejecimiento en barricas de roble. Cada una, con capacidad para 20.000 litros.
Las nuevas generaciones de la familia Lorente aportan su formación universitaria en viticultura y enología.
Las 12 hectáreas de nuestros viñedos se extienden, entre los 700 y 800 metros de altitud, por el paraje conocido como el Cerro del Gato. Una estribación de la Sierra de la Contraviesa, en el término municipal de Albuñol, situado en la comarca de La Alpujarra granadina.
Los suelos en los que crecen las cepas de Tempranillo, Vijiriego o Pedro Ximénez –entre otras– son francos, con una óptima proporción de arena, limo y arcilla, y ligeramente ácidos. Entre Sierra Nevada y el Mediterráneo, nuestra uva madura en su propio paraíso.
Buena insolación y poca lluvia: de 200 a 400 mm anuales. Con inviernos fríos, debido a la altura y a los aires que llegan de Sierra Nevada al norte y Sierra de Lújar al oeste. Y, por los mismos motivos, primaveras templadas y veranos suaves.
Esta peculiar climatología provoca una brotación temprana de las cepas, a mediados de marzo, y que los racimos maduren lentamente entre julio y agosto. Pero también es la causa de una producción muy baja, de solo unos 11 hectolitros por hectárea. La calidad suele estar reñida con la cantidad...
Un entorno tan especial exige vides especiales y elaboraciones especiales. Desde la vendimia manual hasta el envejecimiento, pasando por el prensado y la fermentación.
Pero la operación que más influye en la calidad de la cosecha es la poda. En la de invierno adecuamos la cepa a las condiciones del año anterior. Mediante la poda en verde, lo hacemos en base a las características del año en curso. En Bodegas Nazaríes mimamos nuestros viñedos.
Calle Real, 23
18700, Albuñol, Granada (Spain)
info@bodegasnazaries.com
T (+34) 680 912 928
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